El Poro en Sierra Leona
También aquí, para no confundir, seguiremos usando Bosque para la “escuela Poro”. Aunque Bush en inglés se traduzca sobre todo como monte. Veremos en las fotos la densa vegetación de todo el paisaje y será fácil imaginar que las zonas de reunión hay que desbrozarlas pero dejando suficiente ‘arboleda’ alrededor para preservar su secretismo e intimidad. Lo que ejemplifica mejor el entorno en que se ubicaban dichas escuelas de iniciación, dado que además, aquí, su orografía es eso, un tupido bosque.
La hermandad secreta Poro era practicada por las tribus Mende, Temne y Sherbro estos también llamados Bulom o Grebo. Se dice que los Temne fueron los últimos en asumirla, validando esta opinión el que solo los Temne del sureste lo practicaban. Que en la región de Yoni al jefe de Poro, se le conociera como Bai Sherbro es prueba evidente de su relación con la tribu Sherbro o Bulom de quienes debieron aprender los ritos del Poro. Lo que refrendaron gentes del entorno como los de Matoteka que afirmaban que “fueron los Bulom quienes introdujeron el Poro”.
Hay varias vías de información, directas e indirectas, de los autóctonos y de quienes interesados pero foráneos estuvieron allí. Es posible que estos tuvieran más interés y consiguieran más información, aunque hay que estar alerta y contrastar para que ninguna se extrajera bajo ninguna presión por leve que fuera.
Los Mende
Los Mende fueron los que más datos sobre sus vidas contaron, a aquellos blancos que insistentemente pretendían hacerse con algunas de sus magníficas máscaras cascos, de los que los Temne carecen, o no los hacían con tanto alarde.
Entre quienes primero admiraron in situ sus obras y se interesaron por sus creadores y modos de vida, la impresión general trasmitida era que los adscritos al Poro no solo gobernaban el país, sino que incluso tenían la capacidad de apropiarse de los bienes de los ‘no’ adeptos, sin importar si eran Temne o de cualquier otra tribu.
Esta confirmación choca con el poco interés sobre cómo se integraba alguien en el Poro, distinguiendo las dos ramas, la de iniciación de los niños, y aquella que se ocupaba, y aún, de las funciones jurídicas y de gobierno. Hasta tal punto había imbricación entre el ‘poder’ y el Poro, que aparte de donde estaba sólidamente instalado, se practicaba y prevalecía en otras regiones donde asumió los nombres de otras hermandades más antiguas, llamadas Rabenle y Maneke y que como antaño también procuraban, sobre todo, mantener la autoridad del jefe. Tan estrecha era la conexión que los jefes según dónde eran Rabenle o Poro.
El Poro en Sierra Leona
El Poro de Sierra Leona que más se conoce es de los Sherbro o Grebo. Los términos muestran una relativa semejanza escrita, no sé si fonética, con los de los Temne y escasacon los Mende. Así encontramos que en el Poro el máximo líder, es Taso para los Grebo, Kasi para los Temne y Gafe para los Mende; el segundo es Làgá los Grebo, Ràká los Temne y Seki o Soko los Mende.
El Poro en Sierra Leona también era un privilegio, cuyo pago asumían los padres o un tutor. Podía comenzar entre los siete y los veinte años del muchacho, pero duraba unos pocos meses. Se realizaba entre noviembre y abril, la estación seca allí, y tras haber terminado la recolección y antes de la nueva siembra.
Despejado y limpio por hombres iniciados el terreno y construidas las barracas, el espacio circundante era de follaje extenso y denso. Procuraban dejar altos arboles con mucho ramaje que rodearan y ocultaran ciertos lugares del interior. La entrada, al igual que hemos visto en Liberia, presentaba una cortina de rafia de palma, a modo de parapeto de entrada, que llamaban Kane, con un acceso móvil como puerta llamado Kamela o Kamehra.
la escuela del Poro
Como emblema de la escuela del Poro se colocaban postes retorcidos Dimomoi. Adentro se encontraba un lugar donde se podían discutir asuntos ordinarios, y un segundo Kani a modo de pantalla ante el recinto o ‘arboleda’ interior. Hay pequeñas cabañas o Bafe para los candidatos.Este lugar pasaba a ser conocido como Kamela o Kamehra, puerta o Bosque del Poro.
Los novicios al llegar a la Kamela se encontraban a un auxiliar llamado Wuja situado al otro lado del primer Kani, dentro del recinto, desde el que preguntaba a cada novicio: “¿Quién está ahí?” y sin esperar respuesta le espetaba preguntas tan dispares como: “¿Puedes traer agua en una canasta? ¿Puedes arrancar de raíz una palmera adulta con tus manos?”.
El Wuja
A lo que el novicio, apercibido previamente, respondía a todo de manera afirmativa. El Wuja entonces desplazaba por un lado la cortina y cogía la mano del muchacho tirando para arrastrarlo hacia el interior, a lo que el muchacho se oponía dejando su pie derecho siempre afuera. Pero este tira y afloja eran intentonas que se repetían tres veces, para a la definitiva introducir al niño. A todo esto, dentro, todo era bullicio atronador de tambores cuernas y griterío.
Nada más entrar el ruido cesa. El Wuja anuncia su llegada y los que están dentro le saludan y dan la bienvenida al nuevo hermano entre la alegría general. Aquí el ritual obliga a un primer pago, consistente por lo habitual en ocho hojas de tabaco que entrega al Wuja.
A continuación se le lleva ante la segunda Kina donde repiten el ritual anterior, tras pasarla efectúa una segunda entrega al Wuja, consistente en doce o dieciséis hojas de tabaco, pasando ya al interior. Habiendo terminado su cometido el Wuja deja en manos de superiores al niño. Estos superiores de mayor a menor son:
la disciplina de Poro
El Taso ejercía el mayor rango en la escuela del Bosque del Poro de los Grebo y Temne; le distinguía un Tânge tangasombrero alto de madera y mimbre, con los “cráneos y fémures del anterior Taso que murió en el Bosque a quien el portador sucedió en el cargo”, según Alldridge, y que Thomas, por otra parte, afirma que “los cráneos son de personas que han infringido la ley de Poro”.
Y V. Dorjahn que “el material esquelético del Ambong o corona de Pa Kasi fue obtenido de aquellos ejecutados por infracciones de la disciplina de Poro”; sea como fuere, formaban parte de su vestimenta plumas de Bulo, o turaco violeta, el gran comedor de plátanos, y vestía un Jambe o mandil de fibra de Dubwi, palma del vino, entretejida.
Llevaba la cara y brazos pintados de rojo y blanco; calzaba Bowi o sandalias con dura suela atadas hasta las rodillas para danzar y cubría de similar manera los brazos y cintura con objetos varios o Bakumabengê. Aun estando en la escuela del Bosque Poro, a veces salía, asistido por iniciados que golpeaban caparazones de tortuga, diciendo: O ndumbi wao,“Taso ha llegado”.
la variedad de idiomas
Conviene volver a incidir en la variedad de idiomas: Los Grebo hablaban Kru, los Temne, Mende; ambos llamaban Tasoa este personaje.Pero no todos los Mende son Temne. La foto de arriba 120 es de Alldridge, pero Northcote Thomas también fotografía otro individuo de igual indumentaria, e ilustrando su foto dice:
“Este Pa Kasi fue fotografiado en el pueblo Mende de Mabonto distrito de Tonkolili región central de Sierra Leona. A este mismo Pa Kasi se conoce como Tasso en las áreas de habla Mende. No es en rigor una mascarada, es un ‘médico’, experto en controlar los poderes de las ‘medicinas’ mágicas y herbales que tienen la capacidad tanto de curar como de matar”
Si he optado por la foto de Alldridge, es por su mejor definición y superior impacto visual, pero es fácil acceder a la de Thomas, y que si no, ponemos a disposición de quien la solicite.
Fuera Taso, Kasi o Gafe, era en sí, un alto cargo de la hermandad masculina Poro, en la que jugaba un papel importante en la iniciación de nuevos miembros, así como en la investidura de los jefes supremos.
Làgá
Làgá era el comisionado. A él le competía tutelar a los candidatos y castigar las ofensas; pintaba su cara de rojo y blanco emulando a los Taso; llevaba un Re o escudo de madera distintivo y espada. A sus seguidores se les permitía atrapar cualquier ave que encontraran en el pueblo, que el jefe podía redimir entregando ropa o arroz. Llamaba a los neófitos diciendo: Henga Soko u “Hombres de Poro”; y ellos, reconociendo que aún no, respondían: “m m m, wâin, wâin” es decir, riendo; entonces todos gritaban Hù Sokoti que es un saludo usual cuyo significado literal es “Hola cabeza del Poro”. Tras los Taso era el segundo en rango en el Bosque.
Los Taso y Làgá eran enterrados desnudos, envueltos en hojas, en el interior del Bosque Poro; antes se examinaba y buscaban alteraciones en el bazo para ver si un Krifi* lo había embrujados; si no, salía el Gafe*, que pregonaba en falsete: Kongo yafe,
“Éltiene la barriga limpia”.
* Los Krifi eran deidades menores o espíritus, a veces benéficos y otras no. El Gafe, o Taso según el lugar, iba avisando con una gran cuerna hueca por la que se hacía oír; hombre e instrumento se llamaban igual, Gafe.
Grados de los iniciados en el Poro
Uno de estos regidores del Poro, por lo general el Làjá, tras darle las instrucciones generales, preguntaba a cada niño cuál era su inclinación para ver en qué departamento integrarle. Cada departamento tenía su recinto, subdividido a su vez con hojas de palma en uno o dos compartimentos. Los muchachos se distribuían en tres grados que a su vez eran:
- 1. Yuyira, solicitaban ser mensajeros, auxiliares del Poro o sirvientes y Wujanga, las clases más pobres.
- 2. Missi y Binima era para hombres mahometanos Mori y futuros hombres diablo.
- 3. Kaimahun, era el grado exclusivo de los jefes de alto rango.
Los diferentes tipos de trabajo, como herreros, ceramistas, tejedores, carpinteros, recolectores de palmeras o granjas etc., se integraban en el Yuyira. Quedando el Missi para los elegidos para el culto.
Juanjo Andreu
Profesor de Bellas Artes y comisario cientifico de arte tribal africano
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