Introducción
En la ciudad de Ouidah, al sur de Benín, se puede encontrar en la actualidad un parque que en tiempos fue un bosque donde se refugió Kpassè, rey de una pequeña ciudad estado llamada Savi, y que en 1717 se enfrentó a Ghezó, el poderoso y recordado rey de los Fon.
La leyenda cuenta que acuciado por los guerreros de Ghezó, Kpassè se refugió en ese bosque, topándose con un nido de pitones que le cortó el paso, entonces solicitó ayuda a Ogún dios de la guerra, el rayo y el trueno, a lo que este ordenó a las pitones que le apoyaran atacando a los hombres de Ghezó consiguiendo repeler el ataque.
Recordando el suceso, Kpassé levantó un templo en el lugar, que aún se mantiene y en donde en la actualidad los fieles veneran y cuidan a la multitud de pitones que en él se encuentran. Tras esto él se convirtió en un majestuoso árbol, un ‘Clorophonia Excelsa’ una subespecie de Iroko, que ya tiene varios centenares de años donde desde entonces descansa.
Kpessè
La misma leyenda habla de los orígenes de Kpessè, parece que con gran influencia yoruba, y a su vez los fieles, adeptos al Vodún, se empezaron a hacer las marcas que dicen este llevaba y que aunque en menor medida, aún se practican en dicho templo, y que llaman de ‘las dos manos’ porque consisten en 5 incisiones en cada lado de la cara, dos pares de ellas verticales en el centro de cada mejilla, un par entre los ojos y un par en cada lado cerca de los temporales.
Al noreste de Togo y de Benín colindando estos con el estado yoruba de Oyo, en Nigeria, es donde hay más adeptos al Vodún, que mantienen su fidelidad hasta el punto en que las escarificaciones que presentan en la cara las repiten en las paredes de sus casas, como muestra de devoción y también de pertenencia a dicho culto.
Esta breve anécdota, creo debe servir para dar a entender la necesidad de recurrir a los textos de los pueblos, para ver con más profundidad este tema así como comprenderlos mejor.
Esta foto, en los Archivos Históricos de los Padres Blancos en Roma, dice en su pie: Hombre Tabwa. R.D. del Congo. S. XX. | Hombre de etnia Nyangatom, Sudán del Sur En su referencia dice: “Muestra en sus escaras los enemigos que ha matad0” |
Jóven Nuba, Sudán Foto Leni Riefenstahl | Hombre Surma, Sudán del Sur – Etiopía. Foto de Eric Lafforgue |
Las escarificaciones
Ana, esta dulce muchacha que vemos abajo fotografiada por Eric Lafforgue también, apuntan a que es del pueblo Bodi, no lo sé, la realidad es que vive con otros vecinos cercanos en Hana, una aldea Mursi del Valle del Omo.
Las escarificaciones se las hizo al cumplir los 14 años y en el 2006 se convirtió al cristianismo, por eso lleva la cruz en el cuello. Su pueblo tiene sólo 300 personas, y esta foto está tomada justo en la entrada de su casa.
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