Introducción
Cayado báculo: todos recordáis la fábula del ‘buen pastor’ idea apropiada por el cristianismo pero como 4 o 5 siglos anterior. Bien, también recordáis qué es una tabla de lavar, aquel artilugio de madera donde las abuelas restregaban la ropa, o qué es un orinal o qué un botijo. Estos objetos nos retrotraen a otros tiempos y a su luz, los más ancianos podrían recordar y contar infinidad de historias.
Los objetos de ayer y hoy nos hablan de su dueño y sirven para activar la memoria. Un móvil, nos dice por la marca y modelo, por cómo está, si cuidado o roto por el cristal, una esquina o por donde se escribe, si lleva y cómo es la carcasa, de quién y cómo es su propietario.
Un cayado es, en origen, la vara en que los pastores se ayudaban para no caerse entre los pedregales o saltando el arroy0, báculo es lo mismo pero apropiado por la iglesia que le otorga una cualidad espiritual y por tanto sagrada, era privativa del obispo, arzobispo cardenal y papa, y que a cada uno de estos pasos tenía que estar personalizado y relatando visualmente el recorrido vital y espiritual del poseedor, debiendo ser de metal noble, oro o plata, y adornado de alguna ostentosa piedra.
Pues eso mismo pasa en todas partes con los objetos que se hicieron y hacen, con los que las gentes, donde estén, también reavivan sus recuerdos relatando sus historias.
Kibango
Los Luba utilizan algo similar, exclusivo de reyes o jefes, son unos cayados o bastones tallados en madera, acabados en su parte inferior por un largo pincho de hierro para poder clavarlos y fijarlos de pie sobre el terreno.
Como se ha dicho antes, lo tallado nos retrotrae, cual textos hagiográficos, a las excelencias del poseedor, en cuanto ascendencia y hechos, por lo que esa expresión Eran, y son, conocidos como Kibango, a su vez el simple hecho de poseerlos, eran muestra de su soberanía sobre el territorio que dominaban, algo que seguía la tradición pues en ella se dice que el primero lo utilizó el héroe mítico Kalala Ilunga cuando se creó el Estado Luba.
Función del Kibango
Casi siempre, y también se ha comentado pero no está de más insistir, se verá en los Kibango tallado el cuerpo de una mujer, porque entre los Luba, esta simboliza el receptáculo del poder espiritual y es recordatorio de los preceptos seculares de la realeza que obligan a los lideres Luba.
Si la imagen de la mujer por sí misma, es lo atribuido más arriba, las múltiples maneras en la que se la pueda representar, son una especie de medalla o insignia a determinado mérito de su dueño. El Kibango además, sabiendo leer, cuenta la historia que aconteció a su propietario y por ello a parte de su familia y ascendentes, hace mención a quién fue jefe y cómo se desarrollaron las ramas familiares y linaje. No deja de ser una referencia para que incluso el mismo propietario al verlas, recuerde aquello que a su memoria le cueste recordar.
Obviamente esas referencias tienen que habérselas contado al tallista, bien el propietario o alguien de su entorno que le conozca bien, que suele ser la madre. Nadie como ella para velar por su hijo y relatar aquello que sabe que admirará el pueblo y lo aunará alrededor del líder, su hijo.
Estilo artístico
No son cetros al estilo europeo, aunque simbolicen lo mismo, pero el cetro se hereda y el Kibango se crea para cada ascendido al poder, como el báculo.
También hemos hablado antes de esto pero permitidme recordarlo: El Kibango tiene su orígen en la épica de los orígenes Luba, que nos cuenta cómo Mbidi Kiluwe, el héroe ancestral que introdujo el concepto de realeza entre los Luba, mostró como sucesor, tras entregarle un bastón concreto, a su hijo Kalala Ilunga.
Se dice que este preciso báculo se ha transmitido de generación en generación y ahora se conserva entre otros objetos del tesoro real de la corte de KaBongo. Las referencias a la mítica epopeya siguen estando presentes entre el tradicional pueblo Luba, siendo reconocido el Kibango como emblema indiscutido de autoridad por los Luba, pero es incluso respetado por los pueblos adyacentes.
el MetMuseum
El Kibango a, está exhibido en el MetMuseum, que nos dice de él:
“Este Kibango muestra una mujer sentada en su ápice y dos caras talladas en relieve a ambos lados del panel inferior. La figura en la corona del bastón representa el espíritu del rey alojado en el cuerpo femenino. Sus brazos cruzados llaman la atención sobre sus senos, que contienen los principios de la realeza divina, mientras que su piel exquisitamente decorada y su peinado elaborado sugieren su estatus, cultura y logros sociales. Las dos caras debajo de la figura sentada se refieren a los espíritus gemelos tutelares del reinado Luba, Mpanga y Mbanze, mirando en direcciones opuestas”.
Cobre
El Kibango b, también está depositado en el MetMuseum, que nos dice:
“El eje de este bastón está envuelto en bandas de cobre, un metal precioso que se origina muy al sur en las cabeceras del río Zambeze. El metal bruñido no solo aumentó la belleza de la pieza, sino que también aludió al dominio del gobernante sobre el comercio a larga distancia. Estos báculos personales a menudo tenían forma de paleta, otra referencia a la importancia del comercio fluvial para la prosperidad de los Luba. Los postes cónicos de hierro que aparecen a ambos lados de la figura femenina sentada en el panel superior son pequeñas réplicas de los yunques utilizados para golpear y dar forma al hierro.
los ritos de investidura prolongados
No solo son una referencia a Kalala Ilunga y su padre Mbidi Kiluwe, a quienes se les atribuye la introducción del trabajo del hierro a los pueblos luba, sino que también recuerdan los ritos de investidura prolongados y difíciles a los que se sometió cada gobernante Luba. A lo largo de estos procesos, los siglos XVIII y XIX vieron una floreciente tradición escultórica Luba que fue diseñada para identificar y glorificar al rey, los jefes y los funcionarios titulados que constituían la compleja jerarquía de liderazgo dentro del Imperio Luba.
Al igual que muchos pueblos africanos, los luba consideran que sus reyes son divinos, dotados de poderes sobrenaturales que pueden influir en el bienestar social y la productividad de la tierra. Como descendientes de los fundadores del imperio, los líderes Luba poseen bulopwe, sangre sagrada, que les permite gobernar y les da derecho a poseer magníficas insignias, incluidos objetos de madera tallados, artículos de metal, cuentas, pieles y plumas. Los ritos Luba de la investidura real se centran en la transferencia de estos artículos o insignias, que se consideran la encarnación de la esencia misma de la realeza”.
Historia
Kibango c, como los dos anteriores propiedad del Met Museum, que sobre él nos cuenta:
“Estos bastones personalizados son documentos históricos importantes. Leída de arriba abajo, la secuencia de diseños figurativos y geométricos traza el linaje del soberano y explica los orígenes de su jefatura. El bastón funciona como un mapa escultórico que ilustra la introducción de la realeza divina en el territorio desde la capital real Luba.
El progenitor dinástico, evocado a través de la figura más alta, es retratado dejando la capital, en el panel superior, viajando a través de la sabana deshabitada, en el eje redondo, y finalmente estableciéndose en su propia corte, en el panel inferior. Los diseños geométricos incisos en los paneles representan elementos espiritualmente significativos dentro del paisaje. De esta manera la mayoría de las personas luba habrían sido conscientes del tipo de información que este bastón tenía”.
Dilanga
Se sabe de al menos tres tipos de estos báculos relacionados con el ejercicio del poder, que varían en función del nivel de quien lo posee, no es lo mismo un rey que un funcionario por mucho rango que tenga.
- Dilanga es el más simple. Es alto y prácticamente un cayado o palo, al que se suele adosar una campanilla que avise de su presencia.
- Misupi es un bastón que en su parte superior presenta una especie de paleta. Esta forma de remo, se debe al agradecimiento que los reyes y con ellos el pueblo Luba, querían mostrar a los barqueros por su contribución sobre el control del reino por sus vías fluviales, protegiendo la región de incursiones y propiciando el comercio.
- Kibango es el que realmente muestra el poder y al que podríamos atribuir el nombre de báculo, como el que exhiben autoridades, ahora sobre todo religiosas, en muchas culturas. Un Kibango muestra la jerarquía incluso dentro de la élite de aquellos que tienen derecho a mostrarlos, como reyes y jefes u otros funcionarios de alto estatus, como gobernadores, líderes de aldeas y médiums espirituales.
Christopher D. Roy
El Profesor Christopher D. Roy, en 1991, nos cuenta: “Al igual que los taburetes, el báculo Luba es conceptualmente complejo. Sin embargo, son más diversos en iconografía, y su propiedad, más democrática.
A diferencia de los asientos cariátides, el báculo Luba no está restringido a los miembros de más alto rango de las circunscripciones políticas. En cambio, el báculo Luba puede pertenecer a una mayor variedad de personas: jefes territoriales, titulares, miembros de Mbudye y adivinos. Los funcionarios de alto nivel que llevan este tipo de bastón los usan en actos públicos para honrar a sus antepasados y guiar a sus descendientes, enseñándoles sobre su relación con el reinado de los Luba.
características distintivas
El Kibango,también se usa durante la investidura del rey de un nuevo territorio: su hermana o esposa planta el Kibango en el suelo al lado derecho del rey. Luego agarra el báculo y con él, realiza su juramento. Además, se decía que el báculo o Kibango era llevado a la batalla y ‘clavado en el suelo entre los enemigos asesinados como signo de cruenta victoria’ ”. El profesor a su vez nos precisa varias características distintivas:
“Si lo viéramos clavado en el suelo, veríamos en su parte más alta:Tallas de figuras femeninas, sentadas o de pie, que representan a las fundadoras de líneas reales específicas, o el propio rey. La figura tiene una cabeza de gran tamaño, inclinada ligeramente hacia el suelo.. Ojos medio cerrados. Escarificaciones en el torso de la figura. La figura se lleva las manos a los senos, en una señal de respeto e indicación de la posesión de secretos reales. Las figuras a veces se cogen o van del brazo, o se dan un abrazo. Como en otros objetos se pueden observar un par de cabezas del tipo Janus, que como en los otros casos representan aMpanga y Banze, espíritus tutelares gemelos del Reino Luba.
Dibulu dya bwadi bwa Mpanga
En la parte media del Kibango se pueden ver unos dibujos geométricos en forma de triángulos simples o repetitivos, o formas de ojo de cerradura o reloj de arena que representan los Dibulu dya bwadi bwa Mpanga; las capitales administrativas o los tribunales reales.
Son raros los simplemente redondos, pero cuando se aprecia en el eje del báculo una parte alargada y lisa, representa la inmensa extensión de la sabana. Algunos incluyen tallas en relieve de cuernos de ungulado que representan los poderes curativos y protectores del Kibango.
Por lo general, un punto de metal en la parte inferior representa la riqueza material y la fuerza del cacicazgo. La pátina oleosa se debe a los años de aplicarle aceite de palma”.
Juanjo Andreu
Profesor de Bellas Artes y comisario cientifico de arte tribal africano